Expresionismo abstracto

 

El Museo Guggenheim de Bilbao presenta una exposición dedicada al Expresionismo Abstracto, un fenómeno tan heterogéneo como sus propios protagonistas. La etiqueta colectiva que el crítico Robert Coates acuñó en 1946 sugiere dos polos opuestos: la intensidad emocional del Expresionismo alemán y la estética formal de la Abstracción europea. Entre los propios artistas había desde neoyorquinos de nacimiento hasta refugiados políticos europeos, pasando por estadounidenses procedentes de la región central y el oeste del país. Pese a sus diferentes biografías y procedencias, los primeros expresionistas abstractos compartían una experiencia común: vivieron en la época moderna de extremos y catástrofes que abarcó dos Guerras Mundiales, la Gran Depresión, la Guerra Civil Española, la devastación atómica y la posterior Guerra Fría, entre otros terribles acontecimientos históricos. Sin embargo, el incipiente papel de EE. UU. como potencia mundial contribuyó a promover una paralela confianza en su floreciente escena artística.

Masculin et féminin (Mâle and Female), 1942-43, Jackson Pollock, Philadelphia Museum of Art

Masculino y femenino (Mâle and Female), 1942-43, Jackson Pollock (Philadelphia Museum of Art). Si bien el pintor expresa sus emociones y transmite la sensación de estar presente en la obra, la percepción del espectador constituye el elemento final de esta interacción. La pintura abstracta “se enfrenta al espectador” (it confronts you), afirmaría Pollock en 1950.

El Expresionismo abstracto fue clave en la evolución del arte del siglo XX. Sin embargo, sorprendentemente, en Europa no se ha realizado ningún estudio de calado de este movimiento desde 1959. Con más de 130 pinturas, esculturas y fotografías procedentes de colecciones públicas y privadas de todo el mundo, esta ambiciosa exposición organizada por la Royal Academy of Arts de Londres, con la colaboración del Museo Guggenheim de Bilbao, engloba obras maestras de los más aclamados artistas estadounidenses vinculados con este movimiento, así como otras figuras menos conocidas, pero no por ello menos relevantes. Esta selección pretende revaluar el Expresionismo Abstracto, reconociendo que, aunque a menudo se percibe como un todo unificado, en realidad fue un fenómeno extremadamente complejo, variable y poliédrico.