año 2015

Amsterdam, Van Gogh Museum

El Museo Van Gogh de Amsterdam estrena una nueva museografía en el 125 aniversario de la muerte del pintor, con su historia personal como hilo conductor. La impactante puesta en escena invita al espectador a redescubrir la obra de este fascinante artista desde una perspectiva histórica y vivencial. A lo largo de las tres plantas del museo el recorrido ofrece una sucesión de ámbitos temáticos en los que les obras están contextualizadas mediante comentarios y citas del propio artista sacadas de su correspondencia. En la parte de la muestra dedicada a los artistas amigos de Van Gogh, se escenifica el cambio que se operó en su estilo cuando marchó a vivir a París. El descubrimiento del impresionismo fue una autentica revelación. [:]Descubre entonces el poder extraordinario de la luz natural y su efecto sobre la percepción de los colores. Es la época en la que conoce a Émile Bernard, Toulouse Lautrec, Pissaro y Signac, entre otros. Mención especial merecen los cinco cuadros de su amigo Gauguin, entre ellos un interesante retrato de Van Gogh realizado en 1888 cuando ambos artistas compartían la « casa amarilla » en Arlés. Admirador de Rembrandt y de Rubens, Van Gogh se interesó de manera muy especial por una serie de pintores del XIX representados aquí por interesantes obras de Delacroix, de retratistas de la vida rural como Léon Augustin Lhermitte, Joszef Israël y Jules Breton, de su maestro Anton Mauve y de dos destacados artistas de la escuela de Barbizon, el paisajista Charles-François d’Aubigny y su admirado Jean-François Millet, del que el propio Van Gogh reinterpretó varios de sus cuadros como El sembrador. Como epílogo el museo ha reunido una selección de obras de algunos de sus discípulos más prestigiosos: Kees Van Dongen, Maurice Vlaminck y Francis Bacon.